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Cómo escoger un lubricante respetuoso con tu mucosa vaginal

19.09.2023

Los lubricantes son productos que se utilizan durante las relaciones íntimas para mejorar la experiencia sexual, aumentar las sensaciones placenteras y amortiguar el roce en el coito u otras prácticas sexuales que implican penetración vaginal o anal.

Un buen lubricante ayuda a reducir la fricción y por lo tanto, reduce los microtraumatismos sobre el tejido y la mucosa vaginal o anal, de manera que ayudan a reducir o aliviar el disconfort durante el sexo e incluso el dolor (dispareunia).

La gama de opciones es interminable. 

Existe una amplia selección de lubricantes vaginales disponibles en el mercado actual: con base de agua, con perfumes, con sabores, con colores, con efecto frío-calor, retardantes del orgasmo…

Si necesitas un lubricante para mejorar tu vida íntima, estás en el blog adecuado porque te voy a ayudar a escoger el mejor de todos.

¿Cómo? Enseñándote a elegir un buen producto en base a sus ingredientes porque cuando hablamos de salud vulvovaginal, no vale cualquier cosa. Así que, amiga, no te eches ahí abajo lo primero que te vendan.

Antes, lee esto y ya luego decides…

Lubricantes con base de agua, aceite o silicona

Vamos por partes.

Puedes escoger un lubricante según su base.

Lo primero que tienes que saber es que los lubricantes pueden tener diferentes bases: de agua, de silicona, de aceite mineral o de aceite vegetal.

Los lubricantes que menos conflicto van a generar a tu mucosa vaginal son los de base acuosa. Aunque la pegan que tienen es que suelen absorberse más rápido que otros tipos, son la opción más segura y los que siempre voy a recomendarte.

Los lubricantes con base de silicona son aconsejables para el sexo anal, ya que la silicona no se absorbe por la piel y permite largas sesiones de sexo con juegos donde la penetración es el elemento estrella.

Rechaza los lubricantes con base de aceite porque se asocian a mayor daño potencial de las membranas vaginales. De hecho, asociaciones importantes como la Asociación Española Para el Estudio de la Menopausia desaconsejan radicalmente el uso de lubricantes con base de aceite. Suelen ser aceites refinados y contener mucha parafina. Se popularizaron a través del porno, pero no son un buen producto para usar de manera habitual en tus relaciones sexuales.

Aunque los lubricantes vaginales han demostrado ser efectivos, difieren en su composición y existe preocupación por los atributos de algunos productos.

Muchas marcas de lubricantes no publican sus ingredientes en las etiquetas y sin embargo contienen una amplia gama de substancias y excipientes que pueden afectar el pH y la osmolalidad.

Se pueden clasificar según:

  • Características químicas: osmolalidad y pH.
  • Componentes individuales: parabenos, glicoles y conservantes.
  • Efectos secundarios: daño tisular y/o daño espermático.

La osmolaridad

La osmolalidad determina la cantidad de partículas disueltas de un líquido. En este caso, de un lubricante. La osmolalidad refleja la concentración de sustancias que contiene y cuanto más baja sea, mejor para la salud genital.

La Organización Mundial de la Salud recomienda que la osmolaridad de los lubricantes íntimos no supere los 380 mOsm/kg para minimizar el daño epitelial.

Como en la práctica esto es difícil de lograr, la mayoría de productos a la venta exceden con creces este valor. Así que, con un límite superior de 1200 mOsm/kg generalmente también se considera aceptables.

Cuanto mayor sea la osmolaridad del lubricante, mayor será la posibilidad de causar irritación de la mucosa y daño tisular. 

La alta osmolalidad también se ha asociado con daños en la motilidad espermática, así que, si estás en un proceso de embarazo natural, atención al tipo de lubricante que usas en las relaciones porque puede deteriorar el esperma.

El pH del lubricante

Gracias a los estrógenos, las paredes vaginales están recubiertas de lactobacilos vaginales. Y gracias a que en tu vagina viven millones de estas bacterias, el pH de la mucosa es bajo, lo que previene y reduce la colonización de otros patógenos. De este tema te he hablado anteriormente en Un microuniverso en tus bajos.

A medida que los niveles de estrógeno disminuyen (como por ejemplo sucede en la menopausia), el número de lactobacilos también cae y, por lo tanto, aumenta el pH vaginal. Esto proporciona condiciones más favorables para que crezcan microrganismos patógenos en la vagina, aumentando el riesgo de infecciones de orina o candidiasis.

El nivel de pH en lubricantes también varía mucho y hay que tenerlo en cuenta para no alterar el pH fisiológico de las mucosas vaginal y/o rectal. A tener en cuenta es que el pH de la vagina y del recto son diferentes, por lo que un mismo lubricante no cubrirá el espectro que se necesita. Si practicas sexo vaginal y también sexo anal, necesitarás un lubricante para cada ocasión porque el pH de la vagina suele estar en 3.8-4.5 y el pH de la mucosa rectal en 7.

Volviendo al tema de la fertilidad, el pH óptimo para los espermatozoides es de 7,2 a 8,5 y la motilidad de los espermatozoides cae drásticamente cuando el pH está por debajo de 6.

Libre de parabenos

Los parabenos son ingredientes que han suscitado preocupación por su seguridad en los últimos años. Son conservantes que se usan habitualmente en la industria cosmética y alimentaria y también se pueden encontrar en algunos lubricantes.

Los parabenos tienen un efecto disruptor endocrino, es decir, imitan a los estrógenos. De ahí el recelo general que existe alrededor de estos conservantes y su potencial riesgo de contribuir al cáncer de mama. Muchos estudios no han sido concluyentes al respecto, así que existe actualmente bastante ambigüedad sobre su seguridad.

Glicoles

Los glicoles actúan como emolientes y humectantes y se añaden a los lubricantes para darles texturas muy determinadas. Los glicoles incluyen el monolaurato de glicerol, el propilenglicol PEG-8 y el glicerol o la glicerina.

Los glicoles son el ingrediente principal que determina la osmolalidad de un lubricante. Para mantener la osmolaridad de un lubricante por debajo del límite superior del rango aceptable, se recomienda que la concentración de glicerol, de propilenglicol o la mezcla de glicoles no supere unos porcentajes determinados.

El problema con los glicoles es que son derivados de la glicerina, un subproducto del azúcar. Por ello, los glicoles son ingredientes que pueden generar mayor riesgo de infecciones de microrganismos que se nutren de glicerina y azúcares, como la candidiasis. Por otro lado, varios estudios in vitro han visto que los glicoles matan a los lactobacilos vaginales, estas bacterias in vitro, lo que sugiere una mayor probabilidad de sufrir infecciones y vaginosis bacteriana.

Se cree que la glicerina también daña la membrana flagelar de los espermatozoides y por lo tanto puede causar una disminución de la motilidad espermática.

Libre de bactericidas y conservantes agresivos

En los lubricantes es necesario añadir substancias para evitar que el propio producto se infecte de bacterias y microrganismos. Sin embargo, el propio bactericida que se usa para preservar el lubricante puede tener efectos contraproducentes en la vagina y favorecer un desequilibrio o disbiosis.

Dentro de los excipientes a evitar, sobre todo evita aquellos lubricantes que lleven Clorhexidina y Polyquaternium-15. La Clorhexidina es un microbicida de uso muy común y el Polyquaternium-15 es un conservante muy utilizado en la industria cosmética y la perfumería. Aunque su uso está regulado y han de respetarse unos máximos, se asocian con daños e irritaciones en las mucosas y la piel.

Conclusión y Recomendaciones

A continuación te dejo algunas recomendaciones de los lubricantes con mejor composición para ayudarte con la lubricación sin poner en compromiso tu salud íntima.

Tomando de referencia la revisión de N. Potter & N. Panay (2020) "Vaginal lubricants and moisturizers: a review into use, efficacy and safety", estos son los lubricantes íntimos que pasan su aprobado ya que cumplen con una serie de parámetros que minimizan el daño epitelial de la mucosa vulvar y vaginal.

En el estudio analizan hasta 35 tipos de lubricantes de marcas ampliamente conocidas y que se comercializan a nivel mundial, pero atención porque no analizan todos los productos del mercado. Por lo tanto, si alguno de los lubricantes que utilizas no sale en el listado de los que han superado los parámetros saludables, que no cunda el pánico. Quizá es porque no estaba en la lista de los lubricantes seleccionados para el estudio.

La selección recomendada en base a este estudio es la siguiente:

  • Yes Baby Sperm-Friendly Lubricant
  • Yes Vaginal Moisturiser
  • Balance Active Menopause Vaginal Moisturising Lubricant
  • Good Clean Love Lubricant
  • Yes Water Based Intimate Lubricant
  • Durex Sensilube Lubricante Vaginal
  • System Jo
  • Sylk Natural (aunque su osmolaridad es de 877 mOsmol/Kg.)
  • Higher Nature V Gel Aloe Vera Lubricante (aunque su osmolaridad es de 1646 mOsmol/Kg.)

En resumen...

  • Los lubricantes se usan ampliamente con buenos resultados y con mínimos efectos secundarios negativos.
  • Son especialmente interesantes en mujeres que no pueden usar terapia hormonal de estrógenos.
  • Deben elegirse productos con un pH y una osmolaridad similares a las secreciones naturales de la vagina, y respetar los parámetros aconsejados para reducir la irritación de la mucosa vaginal.
  • Los productos que contienen ácido hialurónico son muy eficaces.
  • Importante seleccionar aquellos productos libres de parabenos, clorhexidina y Polyquaternium-15 debido al potencial de efectos adversos.